Juan Pablo Zaloechevarría, hijo de Julián Zaloechevarría, uno de los autores del asalto al Banco Río de Acassuso, fue detenido junto a otro ladrón en Mar del Plata, cuando intentaba sustraer una cubierta de una camioneta. Su hermano Juan Manuel también tiene antecedentes delictivos.
Posiblemente al leer estas líneas, Juan Pablo Zaloechevarría sienta en la cárcel un ataque directo a su ego. No es para menos: su padre fue uno de los autores de “El robo del siglo” al Banco Río de Acassuso, en 2006, y él ni siquiera logró sustraer, en plena madrugada, una rueda de auxilio de una camioneta estacionada en el macrocentro de Mar del Plata.
Cuando en el parte policial de la Jefatura Departamental local se pudo leer su apellido, en el marco de un operativo de rutina con dos aprehendidos, se encendieron las alarmas. Es que tanto el padre de Juan Pablo, Julián (alias “El Paisa”), como el hermano, Juan Manuel, cuentan con un importante recorrido delictivo, y son parte de una familia con origen local.
Sin embargo, por el tipo de robo que se le adjudicaba al menor de los tres hombres, en un comienzo los investigadores tuvieron una sensación que mezclaba cautela con incredulidad. Se trataba de un simple intento de robo de una cubierta, cuando los otros Zaloechevarría solían dedicarse a cometer verdaderos golpes comando.
Julian Zalloechevarría (centro) durante el juicio en que fue condenado por “El robo del siglo”.
El apellido de “El Paisa” se hizo famoso en 2006, luego de que el 13 de enero de ese año un grupo de experimentados delincuentes cometiera un asalto de película contra el Banco Río de Acassuso. Literalmente, el caso llegó al cine y es considerado uno de los mayores robos de la historia mundial: los ladrones entraron al establecimiento con armas de juguete, mantuvieron de rehenes a decenas de personas, pidieron y comieron pizza, y luego, antes de huir por un túnel que habían cavado durante meses y que conducía a un desagüe, vaciaron 147 cajas de seguridad.
El botín nunca fue revelado, pero se calcula que además de gran cantidad de joyas se apoderaron de unos 20 millones de dólares, de los cuales la policía sólo recuperó uno. Para ese entonces, la entidad crediticia estaba rodeada por más de 300 efectivos. Pero cuando el primero de ellos entró en la bóveda, ya no había nadie. Sólo se encontró con un mensaje escrito por la banda: “En barrio de ricachones, sin armas ni rencores, es sólo plata y no amores”.
Los delincuentes serían luego identificados y condenados tras una delación que también tiene vínculo con Mar del Plata. Fue Alicia, la hermana de Margarita Di Tullio -más conocida en la mitología urbana como “Pepita, la pistolera”, ya fallecida-, quien entregó a su marido Rubén Alberto “Beto” de la Torre, despechada por una infidelidad que descubrió tras el golpe. Detrás suyo cayeron Luis Mario Vitette Sellanes, más tarde deportado a su país de origen, Uruguay; Sebastián García Bolster, el “ingeniero”; Fernando Araujo, el “cerebro” del grupo, y el propio Julián Zalloechevarría, quien ofició de chofer de la combi en la que escaparon del lugar y que años después se recibió de abogado penalista. Hoy, todos están libres y hay quienes sospechan que un integrante más de la banda nunca fue identificado ni detenido.
En octubre 2015, otro robo a un banco (Santander Río, vaya paradoja) de Temperley -que emuló el golpe anterior- provocó la movilización de los detectives más experimentados en el tema. Casi un año después, en septiembre de 2016, fue acusado por el hecho nada más y nada menos que Juan Manuel Zalloechevarría, el hijo mayor de “El Paisa”, de entonces 35 años. Según los investigadores, se trataba del hombre que había entrado al establecimiento disfrazado de gendarme, para luego mostrarle al custodio del lugar fotos de sus principales familiares, amenaza que paralizó al uniformado.
El ingreso de los ladrones, esa vez, se hizo en el momento justo en el que cerraba la entidad. Todo duró cuatro minutos: otro ladrón con antifaz y disfrazado de policía entró con un cómplice vestido como empleado de correo. Mientras uno encañonó a los empleados y al custodio, los otros dos llenaron con billetes una bolsa. Huyeron en una camioneta con ocho millones de pesos. Cuando lo atraparon, Zalloechevarría tenía en su domicilio disfraces de policía y un plano de una sucursal del Banco Francés de Mar del Plata que, se presume, planeaba asaltar.
En julio de 2020, tras casi cuatro años preso en el penal de Florencio Varela, el hijo mayor de “El Paisa” fue noticia nuevamente al contar que en dicha cárcel tanto él como casi todos los otros reclusos se habían contagiado de coronavirus.
Juan Manuel Zalloechevarría.
Este martes a la madrugada llegó el momento trístemente célebre de Juan Pablo, el hijo menor de “El Paisa”, quien fue detenido en Alvear, entre Colón y Bolívar, cuando personal policial de la Subcomisaría Casino lo descubrió junto a otro hombre mientras intentaba sustraer la rueda de auxilio de una camioneta marca Toyota Hilux allí estacionada.
En su poder, los uniformados hallaron y secuestraron un corta candado, dos varillas extensoras para desenganche de auxilio de pick up, dos controles y dos teléfonos celulares, entre otros elementos que se emplean para la sustracción de vehículos. Durante el operativo, se pudo establecer que los dos aprehendidos se desplazaban en un rodado marca Chevrolet Corsa, que también fue incautado.
Notificado del caso, el fiscal de Flagrancia imputó a Zalloechevarría y a su cómplice, de 38 años, por el delito de “Tentativa de Robo” y ordenó que ambos fueran trasladados a la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán.